Algunas veces, las menos, hago alguna receta que no tiene demasiado éxito entre mi familia. Son recetas que a mi me apetece elaborar o cuyos ingredientes me entusiasman pero que a ellos, de gustos más convencionales, no les hacen demasiada gracia. Sin embargo, os garantizo que este bizcocho no ha sido una de esas recetas "frustradas". El éxito ha sido total. No ha durado ni 48 horas. Ha sido tal el éxito que ni siquiera me han permitido hacerle una foto completo.
Tenía ricotta en el frigorífico así que me puse a buscar en internet una receta que me permitiese utilizar mi "tesoro". Digo esto porque cada vez es más difícil encontrar este queso italiano que a mi me apasiona. Me encanta para untarlo en la tostada, con un poco de mermelada Mmmm! La receta, como no, la encontré en el blog de una italiana afincada en España, se llama La Zuccheriera.
Ingredientes
3 huevos
200 gr de azúcar glass
250 gr de ricotta
1 cucharadita de extracto de vainilla
100 gr de mantequilla
200 gr de harina
1 sobre de levadura
una pizca de sal
nutella al gusto
Procedimiento:
Precalentar el horno a 180 grados y engrasar un molde de bizcocho. Tamizar los ingredientes secos (harina, levadura y sal) y reservar. Batir los huevos y el azúcar. Después, agregar el extracto de vainilla, la mantequilla derretida, el ricotta y, por último, añadir los ingredientes secos. Poner la mezcla en el molde y echar por encima la nutella, ésta penetrará sola en la masa, a medida que el bizcocho se va cociendo. Hornear durante unos 35 o 40 minutos. Yo lo hice en un molde de rosca metálico y se ha hecho con bastante rapidez.